La decisión de Biden llega tras semanas de creciente preocupación dentro del Partido Demócrata sobre su salud mental. Su desempeño en el debate del 27 de junio contra Donald Trump fue ampliamente criticado, y muchos dudaban de su capacidad para llevar a cabo una campaña efectiva y gobernar el país por otros cuatro años. Más de 30 legisladores y líderes del partido, incluyendo a la ex presidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi y al ex presidente Barack Obama, habían instado a Biden a dar un paso al costado en favor de un candidato más joven y competitivo.

Kamala Harris, ahora respaldada por Biden, emerge como la principal candidata demócrata. Otra opción hubiera sido una convención demócrata abierta el 19 de agosto para elegir un nuevo candidato, un proceso que podría haber complicado las posibilidades del partido. Sin embargo, el apoyo de Biden a Harris podría consolidar su posición dentro del partido, aunque las encuestas actuales muestran que también enfrenta dificultades para vencer a Trump.

Biden expresó su agradecimiento a quienes han trabajado para su reelección y destacó el papel de Harris como su "socia extraordinaria". En otro tuit, reforzó su respaldo a Harris: “Mi primera decisión como nominado del partido en 2020 fue elegir a Kamala Harris como vicepresidenta, y fue la mejor decisión que tomé. Hoy, ofrezco mi total apoyo a Kamala para ser la nominada de nuestro partido este año. Demócratas: es tiempo de unirnos y derrotar a Trump. ¡Hagamos esto!”

Este movimiento de Biden marca la primera vez en décadas que un presidente estadounidense se retira de una carrera de reelección, desde que Lyndon Johnson decidió no postularse para un segundo mandato completo en 1968. La noticia añade tensión a una campaña ya marcada por el reciente atentado contra la vida de Trump, quien sufrió una herida en la oreja.

A pesar de la retirada de Biden, su capacidad para cumplir con sus deberes presidenciales durante el resto de su mandato, que termina en enero, será probablemente objeto de escrutinio, especialmente por parte de los republicanos.