Tras emitir su voto, el presidente fue consultado sobre si el momento le parecía agridulce, a lo que respondió: “Es simplemente dulce”, manifestando su confianza en la victoria de Harris en los comicios.

Este momento se da cuatro años después de que Biden votara en las elecciones de 2020, en las que recibió la mayor cantidad de votos en la historia para un candidato presidencial en Estados Unidos. Este año, luego de decidir no postularse para un segundo mandato, Biden ha mostrado su respaldo a Kamala Harris como la nominada demócrata, dejando la contienda y manteniéndose en gran medida alejado de la campaña electoral, lo cual ha permitido a los votantes conocer más a su posible sucesora.

Por su parte, Harris ha trabajado en destacarse por los logros de la administración de Biden mientras busca alejarse de los puntos débiles que preocupan a los votantes. Las encuestas más recientes muestran a Harris y Trump empatados en los estados clave, mientras que a nivel nacional Harris sostiene una ligera ventaja de un punto.