Las revelaciones más oscuras sobre la muerte de Matthew Perry: médicos, drogas y una red de suministros clandestinos

Un reciente documental ha sacado a la luz escalofriantes detalles sobre los últimos días de Matthew Perry, revelando que el actor habría recibido 27 dosis de ketamina antes de su trágico fallecimiento en octubre de 2023.
El especial, titulado "Matthew Perry: A Hollywood Tragedy", reconstruye la vida y el ocaso del querido protagonista de Friends, y expone cómo una supuesta red de médicos, asistentes y traficantes contribuyó a su desenlace fatal.
A vacant seat, but a heart full of memories. RIP Chandler. Thanks for all the laughs. #MatthewPerry pic.twitter.com/tLkEk3d22b
— Sagar (@sagarcasm) October 29, 2023
Según la investigación liderada por el abogado Martin Estrada, Perry estaba recibiendo ketamina fuera del tratamiento médico recetado para su ansiedad y depresión.
Cinco personas han sido acusadas en relación con su muerte, entre ellas dos médicos, su asistente personal y una presunta distribuidora de la droga conocida como la “Reina de la Ketamina”.
Una red de suministros que terminó en tragedia
Documentos judiciales indican que el asistente del actor, Kenneth Iwamasa, junto con Erik Fleming, habrían trabajado en conjunto con los doctores Salvador Plasencia y Mark Chavez para obtener grandes cantidades de ketamina.
Pero el eslabón clave en esta trama sería Jasveen Sangha, la traficante apodada la "Reina de la Ketamina", quien habría proporcionado la dosis letal.
Los hechos reconstruidos en el documental revelan que el último día de Perry, Iwamasa le habría administrado tres inyecciones adquiridas a Sangha, utilizando jeringas facilitadas por el doctor Plasencia. Estrada señaló que Plasencia veía esto como un negocio lucrativo, según mensajes de texto recuperados en la investigación.
La última dosis y el momento fatal
El 28 de octubre de 2023, Perry recibió su primera dosis de ketamina a las 8:30 de la mañana y otra cuatro horas después. La tercera inyección ocurrió apenas 40 minutos más tarde. Horas antes de su muerte, Perry habría solicitado a su asistente "una dosis grande" y le pidió que preparara el agua caliente de su jacuzzi.
Cuando Iwamasa salió a hacer unas diligencias, el actor quedó solo en su casa. Al regresar, encontró el cuerpo sin vida de Perry en el jacuzzi, un desenlace que ha generado un gran debate sobre la responsabilidad de quienes lo rodeaban.
Un juicio que puede sentar un precedente en Hollywood
Mientras que Sangha y Plasencia han negado los cargos en su contra y enfrentarán juicio en marzo, Iwamasa, Fleming y Chavez ya se declararon culpables y esperan sentencia.
El caso ha abierto una discusión sobre el uso indiscriminado de drogas en la industria del entretenimiento y el papel de los proveedores.
Estrada dejó un mensaje contundente en el documental: "Ya no culpamos a la víctima. Ahora responsabilizamos a quienes venden y suministran estas drogas por aprovecharse de personas con problemas de adicción".
La muerte de Perry podría marcar un antes y un después en la lucha contra el suministro ilegal de sustancias en Hollywood, dejando al descubierto una red de facilitadores que operan en las sombras de la fama.