El toque de queda de este fin de semana en Miami Beach fue una medida disuasoria efectiva, tomada bajo la guía profesional del jefe de la policía y la administradora local, para impedir que el número de visitantes alcanzara niveles incontrolables, afirmó Alex Fernández, comisionado de la ciudad balneario.
“La experiencia nos decía que el tercer fin de semana era el más peligroso de las vacaciones de verano. Históricamente, durante estos días se registran muertes, aumentan los hechos violentos y siempre culminan declarando el estado de emergencia en la ciudad”, explicó Fernández a DIARIO LAS AMÉRICAS.
Lo más importante es que no se registraron estampidas, ni tiroteos, ni víctimas mortales, sostuvo el político.
Uno de los efectos de las distintas medidas tomadas por la Ciudad es que “el número total de arrestos por delitos graves se redujo un 26 por ciento con relación al año pasado”, dijo Fernández quien afirmó haber recorrido las calles durante las noches del toque de queda.
Sobre la infructuosa demanda de varios negocios presentada en corte el sábado para que un juez suspendiera el toque de queda, Fernández sostuvo que “afortunadamente” el juez dictaminó en favor de la Ciudad.
“El juez entendió que la medida era necesaria para prevenir que las multitudes se apoderaran de las calles y era la forma adecuada de prevenir los delitos que hemos visto en años anteriores”.
El político insistió en que el fallo judicial del sábado confirmó que la medida temporal era razonable e importante para mantener la ley y el orden durante un período crítico. Señaló que el toque de queda no fue reactivo, sino una herramienta que la Comisión de la Ciudad había respaldado y aprobado desde el año anterior, cuando se registraron hechos violentos con víctimas mortales.
"En vez de esperar a que hubiera un muerto para después imponer el toque de queda, algo que carece de lógica, es mejor adelantarse a una muerte prevenible, imponiendo el toque de queda, junto con las otras medidas restrictivas tomadas por la ciudad”, indicó.
Fernández no cree que los negocios locales insistan en demandar a la Ciudad. Ya que el toque de queda solo se implementó durante este fin de semana y estuvo vigente hasta el lunes, 18 de marzo, a las 6:00 a.m.
Tampoco considera que la Ciudad tenga que recurrir a una medida tan extrema en lo que queda de Spring Break. “A no ser que ocurran hechos de violencia. Eso sí, continuarán en pie el resto de las medidas impuestas en Miami Beach, durante el resto de marzo”, subrayó.
Hasta la fecha, en estas vacaciones de primavera, las autoridades policiales han confiscado 43 armas de fuego. Solo durante el fin de semana que acaba de concluir, los lectores de matrículas analizaron más de 26,700 vehículos que dieron lugar a 144 citaciones penales y más de 1,100 citaciones de tráfico, reportó Fernández.
Sobre el caos registrado este fin de semana por vacacionistas en la ciudad de Fort Lauderdale y el tiroteo de Jacksonville Beach con saldo de una persona muerta y tres heridos, Fernández dijo que "indican que tomamos las medidas adecuadas".
El político cree que la sociedad en general debe actuar mejor. “No podemos aceptar que exista este tipo de conducta, esa falta de civismo y violencia”.
Criticó las imágenes de los jóvenes peleando a trompadas en las playas de Fort Lauderdale y el “triste tiroteo” de Jacksonville Beach.
Reconoció que Miami Beach no puede “continuar operando bajo órdenes de emergencia, toques de queda y medidas tan estrictas. Es algo que no se puede sostener en el tiempo. Nuestros policías están trabajando 13 horas al día, a pesar de contar con la ayuda de 18 agencias policiales. Este despliegue de tantos recursos solo se puede hacer de manera temporal. Es imposible de mantenerlo en el tiempo de manera permanente”.
Fernández cree que como sociedad “deberíamos actuar mejor para no tener que recurrir a estas medidas tan drásticas, simplemente para impedir que alguien muera”.
