Tormentas devastadoras golpean el sureste del país: nueve muertos y miles de afectados

Un violento sistema meteorológico con lluvias torrenciales y vientos huracanados ha azotado el sureste en las últimas horas, dejando un saldo trágico de al menos nueve personas fallecidas y causando estragos en varios estados.
En Kentucky, las intensas inundaciones han obligado a más de mil rescates mientras los equipos de emergencia trabajan contrarreloj para auxiliar a quienes han quedado atrapados por la crecida del agua.
El gobernador Andy Beshear confirmó que al menos ocho personas perdieron la vida en su estado, entre ellas una mujer y un niño arrastrados por la corriente. Además, advirtió que la cifra de víctimas podría aumentar conforme avancen las tareas de búsqueda y rescate.
"Este es uno de los fenómenos meteorológicos más graves que hemos enfrentado en al menos una década", señaló el mandatario estatal.
Las muertes se reportaron en varios condados, incluidos Hart, Pike y Clay, y en muchos casos, las víctimas quedaron atrapadas en vehículos que intentaban cruzar carreteras inundadas. Ante esta situación, Beshear instó a la población a evitar circular por las rutas para prevenir nuevas tragedias.
El temporal ha dejado sin electricidad a casi 40,000 residentes, mientras que 9,800 conexiones de agua están fuera de servicio y otras 26,000 permanecen bajo advertencia de hervir el agua antes de consumirla, según informaron las autoridades en una conferencia de prensa.
En Georgia, una persona murió en Atlanta cuando un árbol cayó sobre su vivienda durante la madrugada del domingo, según confirmó el capitán Scott Powell, del cuerpo de bomberos de la ciudad.
Desde el sábado, las tormentas han provocado inundaciones repentinas en Arkansas, Tennessee, Kentucky y Virginia, mientras que más de 67 millones de personas estuvieron bajo alerta climática invernal el domingo, con el sistema avanzando hacia Georgia, Alabama y Mississippi.
El impacto del temporal ha sido devastador: carreteras intransitables, edificios dañados y apagones masivos han afectado a miles de hogares y comercios en Kentucky, Tennessee y otras regiones.
En Alabama, se registraron fuertes vientos y un tornado tocó tierra en el condado de Hale durante la noche, mientras que en Virginia, varios deslizamientos de tierra bloquearon rutas entre el sábado y el domingo.
Ante la magnitud del desastre, el presidente Donald Trump aprobó una declaración de emergencia para Tennessee, lo que permitirá al estado acceder a recursos federales para enfrentar la crisis y comenzar las tareas de recuperación.