Las recientes tormentas forman parte de un patrón meteorológico más amplio que anteriormente causó inundaciones en zonas de Florida y provocó lluvias récord en toda la costa del Golfo.

Los meteorólogos predicen que, antes de amainar, este sistema tormentoso traerá precipitaciones significativas a partes de Nueva Inglaterra el viernes.

Tras estas condiciones climáticas se anunciaron emergencias por inundaciones repentinas en suburbios de Pittsburgh como Oakdale y Coraopolis.

En Oakdale, los equipos de respuesta a emergencias utilizaron botes para navegar por las calles afectadas, evacuando a los residentes atrapados por la crecida de las aguas.

Las aguas de la crecida fueron tan potentes que desplazaron grandes objetos, como contenedores de basura, según informaron los medios locales.

Megan De La Torre, residente de Oakdale, habló con KDKA, afiliada de CNN, expresando su preocupación por el futuro de la comunidad. "Esto es devastador. Esto afectará muchas cosas", declaró.

Pittsburgh se enfrentó a su propia crisis, con casi 5 centímetros de lluvia caídos en un solo día, lo que lo convirtió en el día de abril más lluvioso jamás registrado en la ciudad. El torrencial aguacero hizo que una mujer quedara atrapada en su coche, lo que provocó una rápida operación de rescate por parte de los servicios de emergencia de la ciudad.

En Virginia Occidental, las condiciones fueron igualmente fuertes. Los condados de Boone, Cabell y Jackson sufrieron inundaciones que pusieron en peligro sus vidas, y los equipos de emergencia realizaron numerosos rescates acuáticos.

Los efectos adversos de las tormentas no se limitaron a las inundaciones. El viernes por la mañana, más de 60.000 hogares y negocios estaban sin electricidad, una reducción significativa respecto a los casi 120.000 de la noche anterior.

Además, las tormentas provocaron tornados en Florida, causando daños en la zona de San Agustín y al norte de Tampa, según informaron los bomberos y los medios de comunicación.