
Un policía que disparó y mató a un cachorro durante una intervención en 2021 será juzgado en un tribunal federal en Nueva Orleans, a pesar de haber sido exonerado por la jefatura del Departamento de Policía local. Las investigaciones internas determinaron que el uso de la fuerza fue injustificado.
El hecho ocurrió el 10 de abril de 2021, cuando Derrick Burmaster, oficial del Departamento de Policía de Nueva Orleans, acudió a una vivienda en el barrio Lower Garden tras una denuncia por disturbios domésticos. Al ingresar al patio cerrado del domicilio, dos perros corrieron hacia él ladrando.
Según el reporte oficial y las imágenes captadas por la cámara corporal, Burmaster disparó tres veces contra uno de ellos: Apollo, un cachorro rescatado de 18 semanas de la raza Catahoula, que murió en el acto. El animal pesaba apenas 10 kilos y no representaba un peligro, según concluyó la Junta de Revisión del Uso de la Fuerza del propio departamento.
Los dueños del perro, Derek Brown y Julia Barecki-Brown, presentaron una demanda federal en 2022. Alegan que el oficial violó sus derechos constitucionales al disparar sin justificación y reclaman una compensación por el daño emocional causado. Barecki-Brown, que presenció el momento del disparo, gritó desconsolada: “¡Ese es un bebé, ese es un cachorro! ¡Este es el amor de nuestras vidas!”.
A pesar de los informes que señalaron que el uso de la fuerza fue injustificado y que violó el protocolo institucional, Burmaster fue absuelto en 2023 por la máxima instancia de revisión interna. La decisión generó fuertes críticas. La supervisora independiente del departamento, Stella Cziment, fue contundente: “No veo cómo esto se alinea con la política. No entiendo cómo fue exonerado”. En tanto, la jefa del cuerpo policial, Anne Kirkpatrick, admitió haber aprobado la exoneración sin haber revisado las grabaciones de la cámara corporal.
El caso no es aislado: en 2012, Burmaster ya había disparado mortalmente a otro perro alegando haberse sentido amenazado en la entrepierna. Además, en los cinco años previos al episodio con Apollo, el oficial utilizó la fuerza en 11 oportunidades, todas consideradas justificadas por el departamento.
En total, en la última década, se han reportado al menos 11 animales muertos por disparos policiales en Nueva Orleans.
El juicio federal contra Burmaster y la ciudad comienza este lunes. Ni el agente ni el Departamento de Policía han emitido declaraciones, amparándose en el litigio en curso.
Apollo pertenecía a la raza Catahoula, originaria de Luisiana, conocida por sus habilidades de rastreo y caza. Según el United Kennel Club, estos perros son leales, protectores y gentiles.